
“LA OBRA MAESTRA DE UNA BUENA EDUCACIÓN, ES FORMAR ESTUDIANTES RACIONALES, CREATIVOS Y HONESTOS”
viernes, 19 de enero de 2018
viernes, 15 de diciembre de 2017
ARCOTECHO EN LA 68
}
El municipio de Naucalpan parte fundamental de esta obra, gracias,también por el apoyo con las actividades de D.A.R.E.
Nuestros alumnos en un espectacular en un puente de San Bartolo junto con el Presidente Municipal.
COMUNICADO
Por medio del presente se le comunica lo siguiente:
1. Que oriente a nuestro educando en el seguimiento de normas y conductas a la sociedad, tratando de no infringirlas ya que de hacerlo sería en deterioro de su personalidad.
2. Se abrigue en estas vacaciones de invierno para evitar enfermedades respiratorias.
3. El día lunes 18, se llevará a cabo con nuestros alumnos una actividad programada de convivencia escolar sin violencia, rescatando los valores éticos del ser humano, así como las costumbres decembrinas. Hora de entrada 7:50, se cierra la puerta 8:05 salida 13 hrs.
4. El martes 19, el personal docente realizará un análisis de lo acontecido en este primer semestre de actividades por tal motivo no hay clases.
Esperando su comprensión y apoyo para esta actividad, reciban un cordial saludo.
Atentamente la Dirección de la Escuela
lunes, 20 de noviembre de 2017
107 ANIVERSARIO DE LA REVOLUCIÓN MEXICANA

El Ideal para los jóvenes era desplazar la dictadura porfiriana de 30 años.
Los obreros soñaban con la legislación que ofreciera un mínimo de protección contra el abuso de los poderosos.
Los campesinos querían tierras. Si hubiera tenido una ideología bien definida pudo ser de igual trascendencia que la Revolución Francesa o Rusa y servir de pauta para la liberación de muchos pueblos que en el resto del vasto continente se encontraban en similar estado.
LA REVOLUCIÓN empezó el 20 de Noviembre de 1910. Don Francisco I. Madero en 1909 promovió e partido Antireeleccionista inició el movimiento armado ese día pugnando por el "SUFRAGIO EFECTIVO NO REELECCIÓN" y murió por la causa de la Revolución en el episodio conocido como la "Decena Trágica" Pancho Villa tomó a su mando la división del Norte, Emiliano Zapata luchó por la justicia agraria. Venustiano Carranza se levantó contra el gobiernode Victoriano Huerta y de esa lucha se produjo la Constitución Federal del 5 de de Febrero de 1917 que todavía rige a los ciudadanos mexicanos. En
este documento quedaron clarificados los ideales de los principales
jefes de la revolución mexicana.
Motivos Principales
- La injusta distribución de riquezas y
tierra
- La explotación de los trabajadores
- La corrupción política y
administrativa
- La negación de la democracia
- El estancamiento cultural y político del
país
Personajes Importantes
Personajes Importantes
Porfirio Díaz - Dictador que quitó las tierras
a los indígenas y concentró el poder en manos de los hacendados ricos.
Francisco Madero - Revolucionario que promovió
el Partido Antireelecionista iniciando un levantamiento contra el poder de Díaz.
Fue encarcelado y Díaz mantuvo el poder. Madero convenció a otros para que se
levantaran en contra de la dictadura con el Plan de San Luís Potosí.

Emiliano Zapata - Era un joven campesino
rebelde que luchó por la justicia agraria e hizo el famoso Plan de Ayala.
"Tierra, justicia y ley".


miércoles, 1 de noviembre de 2017
DIA DE MUERTOS EN LA 68
El Día de Muertos es una celebración tradicional de origen mesoamericano que honra a los difuntos. Se celebra principalmente los días 1 y 2 de noviembre , coincidiendo con las celebraciones católicas de Día de Difuntos y Todos los Santos.

Los orígenes de la celebración del Día de Muertos en México son anteriores a la llegada de los españoles. Hay registro de celebraciones en las etnias mexicas, maya, purépechas y totonacas.
Los rituales que celebran la vida de los ancestros se realizan en estas
civilizaciones desde la época precolombina. Entre los pueblos
prehispánicos era común la práctica de conservar los cráneos como
trofeos y mostrarlos durante los rituales que simbolizaban la muerte y
el renacimiento.


El paso de la vida a la muerte
es un momento emblemático que ha causado admiración, temor e
incertidumbre al ser humano a través de la historia. Por muchos años, en
diversas culturas se han generado creencias en torno a la muerte que
han logrado desarrollar toda una serie de ritos y tradiciones ya sea
para venerarla, honrarla, espantarla e incluso para burlarse de ella. México
es un país rico en cultura y tradiciones; uno de los principales
aspectos que conforman su identidad como nación es la concepción que se
tiene sobre la vida, la muerte y todas las tradiciones y creencias que giran en torno a ellas.

Las academias de Ciencias, Tecnologías, Español, Artes e Historia, presentaron un magistral trabajo con un tapete artístico integrando la tradicional ofrenda, junto con la exposicion de calaberas realizadas con mucha calidad, además con la participación de la academia de Inglés presentando la introducción en lengua extranjera. La participación de los alumnos fue particularmente extraordinaria, ellos apreciaron el trabajo de sus compañeros, terminando con el concurso de disfraces y el chocolate literario en el turno vespertino.
viernes, 13 de octubre de 2017
LOS PILARES DE LA NACIÓN
Me siento muy orgullosa de publicar un texto que generó un gran estudiante de 3er grado de nuestra escuela, al estar trabajando en la clase de Inglés con el cuadernillo "Los primeros días en el aula después de la emergencia". Guía para docentes de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes Ciudad de México, 23 de septiembre de 2017. Las actividades sugeridas nos llevaron a escribir y compartir como habían vivido el momento del Terremoto del 19 de septiembre de 2017 y diferentes vivencias nos llevaron a este excelente ensayo.
Les invito a leerlo, disfrutarlo y comentar al final.
AL HÉROE ANÓNIMO
Y EN MEMORIA A LAS VÍCTIMAS.
Desperté tratando de imaginar cómo se había vivido aquel diecinueve de septiembre de hace treinta y dos años pues esa mañana, irónicamente, tenía que leer una pequeña reseña histórica sobre aquel sismo devastador que hizo que el año mil novecientos ochenta y cinco marcara un antes y un después en la historia nacional. Por indicaciones de los maestros organizadores pedí mientras leía que se guardara un minuto de solemne silencio en memoria a las víctimas y entonces éste se abrió paso y reinó en toda la escuela y sus alrededores (algo raro y que, a decir verdad,creíamos imposible), nadie se atrevió siquiera a murmurar e incluso las aves parecían entender y respetar, era sepulcral, casi inquietante.
Dos horas después las clases habían terminado, salimos de la escuela con
normalidad aunque un poco más tarde de lo habitual ya que aún
resolvíamos algunos asuntos en clase; después caminábamos por la calle
sin percatarnos de los movimientos de los objetos a
nuestro alrededor y no fue hasta que sentimos la tierra sacudirse
caprichosamente que abandonamos la hipótesis de que esos movimientos
eran causados por el viento. Los árboles se sacudían violentamente, el
piso pareció desplazarse y el temor se hizo presente
en los rostros.
Traté de poner a salvo a mis amigos y a mí y pasado el ajetreo me dirigí
apresurado a mi casa; se podía palpar la tensión en la calle, por el
camino noté la desesperación y consternación que la gente sufría fuera
de sus casas donde habían huido para evadir,
afortunadamente, la fuerza de la tragedia.
La señal telefónica había colapsado y la energía eléctrica fue
interrumpida, por lo que el único medio de información, como hace
treinta y dos años años, era la radio.
La información llegaba a cuenta gotas, cada vez más amarga, las palabras
faltaban, y acongojados, sólo nos atrevíamos a voltear a vernos los
ojos.
En mi corta vida no había tenido noción de lo que era la desesperación,
pero el fenómeno la presentó a mí en su más pura expresión, en esos
momentos en que el pensamiento parece plantarse en la figura de seres
queridos que se encontraban lejos en ese momento,
en la necesidad de ayudar y en la angustia que engrosa los latidos y
hace la fatalidad entrar en el corazón tomándola como propia.
Nadie podía mantenerse indiferente y aunque algunos dejaron ver la parte más lamentable de su ser, la necesidad de ayudar se cosió al corazón embargándolo y movió a las personas,la gente demostraba una fuerza y tenacidad que nadie sabía de donde venía pero que todos reconocían y poseían.
La aterradora y lamentable cifra de decesos continuamente subía, en muchos estados había afectaciones, pero la Ciudad de México había sido la más devastada; la extraordinaria leyenda de su fundación era también su tragedia.
Los reportajes de edificios colapsados se detuvieron por un momento para
dar paso a informes sobre el protagonismo que las personas, que estaban
cerca de esos edificios, empezaron a tomar, fue entonces cuando se
transformaron en lo que algunos llaman "rescatistas",
yo prefiero llamarles "héroes" y, seguramente, las personas rescatadas
les llaman "ángeles" aún si caminan en cuatro patas; quienes
estoica,valerosa y abnegadamente vieron la tragedia a la cara y no
retrocedieron por la idea de perder, incluso, sus propias
vidas, quienes ayudaron donando e incluso sólo compartiendo la angustia
que abrumaba a la nación. Septiembre aún guarda espacio para héroes
patrios.
Las
palabras "solidaridad"
y "altruismo"
no podrían ser mejor definidas, y estas
mismas parecían convertirse poco a poco en una oleada, llegando a
convertirse en un sentimiento que traspasó fronteras, mares y tierra.
Lo vi, de cerca, vi el amor de madre, de amigo, de hermano, de ciudadano, de compatriota, estaba presente, aunque disfrazado detrás de una máscara de preocupación pero dispuesto, activo, fervoroso.
El golpe no derrotó a la gente ni lo hará con una nación entera. Las diferencias eran las que yacían bajo los escombros puesto que se demostró que cuando salvar una vida es prioridad nada era una barrera, ni las limitaciones físicas, ni la edad, ni la situación en la que se encontraba cada persona.
Nadie era diferente, el individualismo sucumbió ante la necesidad de cooperación, todos formaron uno, pronto todos éramos México.
La esperanza latía al unísono con el corazón de las personas afectadas, los voluntarios y toda la nación. El puño cerrado en el aire se convirtió en un símbolo, la organización de la población era extraordinaria y siendo sincero, si no la hubiera visto con mis propios ojos la seguiría considerando utópica.
La algarabía llegaba por momentos cuando una persona era rescatada, los palabras ¡Viva México! y algunas canciones como "Cielito Lindo" tomaban un significado diferente en voz de quienes albergaban la esperanza, el amor y la unión.
Ni
siquiera la lluvia detuvo las labores de rescate, la tierra
parecía mofarse de lo ocurrido hace tiempo y no le bastó con el sismo
que, además, provocó doce días antes, pero no era así, ella nos estaba
demostrando su energía, su grandeza y pedía así que la
valoráramos, nos habló y nos recriminó no apreciar la benevolencia y
generosidad que nos muestra a diario y que a diario ignoramos.
También conversamos con la vida, nos advirtió de su fragilidad y nos sugirió evaluarnos y emprender la mejora.
Hubo lágrimas de dolor, de angustia, de desesperación pero también de alegría, de esperanza y emoción.
Las personas que lamentablemente fallecieron no se habrán ido mientras que su recuerdo persista en sus seres queridos y en los miles de personas, que estoy seguro, comparten su dolor alrededor de todo el mundo.
Este fenómeno nos demostró lo importante de la prevención, de la unión, la fortaleza y la vida misma, nos dio una oportunidad para pensar en nosotros y sobre nosotros, de conocer la solidaridad, y de vivir y entender más allá de la leyenda del sismo que azotó al país, pero sobre todo mostró que aún existe humanidad en las personas.
México sigue esforzándose, México sigue íntegro y su entereza no claudicará
hasta que su riqueza, que reside en su gente, se agote.
Gracias en nombre de México a todos los héroes
que de alguna u otra forma se convirtieron en los pilares que
levantaron una nación que parecía sucumbir, a "los mejores amigos del
hombre" que
son ahora testimonio de la lealtad que puede existir entre ellos y un
humano, y a todos los que con sólo compartir el dolor fueron parte de la
experiencia que sin duda transformará a la sociedad mexicana.
Jonathan Alexis González Gallegos 3° C
Suscribirse a:
Entradas (Atom)