El 21 de marzo se celebra el inicio de la primavera, este día hay un misterioso fenómeno natural y maravilloso que tiene origen muchos siglos atrás.
Todo empieza cuando la mas bella princesa, hija del soldado más valiente es elegida para un honroso sacrificio.

La hermosa princesa camina orgullosa, portando incienso el perfume de los dioses hacia el lugar donde se celebrara la ceremonia, la gran pirámide.
De tras de ella, le sigue la comitiva en silencio aquellos que ofrecerán flores al gran dios.
El color de las flores representa el estado en que se encuentra su espíritu en ese momento, representan sus propias acciones.

Toda la comitiva que viene de tras es el pueblo, que acompaña a la princesa a su casamiento con el dios Kukulkan.
Las flores son entregadas a la princesa para que ella las ofrenda al gran dios, levanta sus brazos y pide clemencia por los pecadores.

Suenan las caracolas, los cascabeles, todos le rinden tributos al gran Dios, y comienza la gran fiesta.